- Arrancó la primera etapa del Tren Maya de Campeche a Cancún
- Innsbruck: si hubo incinerados. Se identifica al segundo normalista
- Se compromete Marcos Aguilar Vega, a la transparencia,
- Participa Gaspar Trueba en la entrega de reconocimientos al Mérito Laboral 2015
- Adán Gardiazábal entregó la unidad deportiva 3 de Mayo
- Mujeres indígenas pueden ser candidatas: Braulio Guerra
- Abarca y Pineda, la pareja que en un mes vio el fin de su suerte en Iguala
- Raúl Salinas es declarado no culpable de enriquecimiento ilícito
- Maestros de Guerrero afinan plan para boicotear las elecciones de 2015
- “No hay garantía de que mi sucesor no sea un estúpido”: Dalai Lama
Fiesta en la casa de campaña
“Los jóvenes no solo son la porra, son la cara alegre y propositiva de mi campaña”, dijo el candidato a la Gubernatura del Estado, Roberto Loyola Vera, al convivir con cientos de jóvenes que fungirán como brigadistas; les pidió que transmitan con respeto y orden la idea clara de este proyecto que subrayó, “es servirle a los queretanos”.
Por la tarde del que fue su primer día como candidato, Roberto Loyola en compañía de su familia, acudió a su casa de campaña ubicada en Calzada de los Arcos No. 110. Ahí, casi esquina con Bernardo Quintana, ya lo esperaban más de 500 taxistas para refrendarle su respaldo; al tiempo, cerca de mil jóvenes de municipios como Querétaro, Cadereyta, San Juan del Río, Corregidora, Tequisquiapan, El Marqués y Huimilpan, coreaban el nombre del candidato que “cree que los sueños son posibles”.
Uno a uno, Roberto Loyola estrechaba la mano de los trabajadores del volante y viéndolos de frente, refrendaba ante ellos su respeto por el gran servicio que le brindan a los queretanos; con Lucy su esposa, colocaba stickers en los vehículos con leyendas como “tengo grandes sueños Querétaro”.
Ahí, teniendo como testigo los 74 arcos del Acueducto de Querétaro construidos por el Marqués de la Villa del Villar del Águila, la postal se completaba con las sonrisas y animo que enviaban desde autos los ciudadanos que transitaban en una tarde de domingo a la queretana; “estamos con usted, ánimo mi candidato y seguro ganas”, fueron frases que en más de una ocasión se pudieron escuchar en Calzada de los Arcos.
Al ritmo de tambores, porras y brincos, Roberto Loyola junto a sus hijos Toñito, Carlota, Andrea y Roberto, ingresó al recinto de casa de campaña que estaba ya nutrido con más de mil jóvenes que lo mismo vinieron de San Juan del Río que del semi-desierto en Peñamiller o de la zona metropolitana; llegaron con ánimo y el común denominador #TodoesPosible.
Fiel a reconocer a su equipo de trabajo, Loyola –como le hablaban los jóvenes- dejó en claro que para él, los brigadistas no solo son la porra y los gritos, “son la cara alegre, propositiva, que construye y nutre con ideas a la campaña”.
“A la queretana” Roberto Loyola concluyó esta fiesta que se vivió en Calzada de los Arcos, quemando un judas en este domingo de gloria, “quememos todo aquello que no nos gusta, aquello que no le suma y abona a éste como un excelente lugar para vivir”, finalizó.
0 comments